Stefan Mandel: el matemático que burló el sistema de seguridad de la lotería y que ganó 14 veces!

Desde las décadas de los años de 1960 hasta la de 1990, el economista rumano-australiano Stefan Mandel ganó la lotería 14 veces. Así fue cómo lo hizo:

Las probabilidades de que Ud. sea devorado por un tiburón, alcanzado por un rayo, o que se le otorguen medallas de oro olímpicas, son mucho más altas que gane la lotería incluso una sola vez. Pero existe un hombre que "entendió a la perfección", es decir que burló o hackeó el sistema de seguridad de la lotería y que ganó 14 veces seguidas! Aquí cabe destacar que en su caso no fue solo un caso de suerte.

"EL MATEMÁTICO DE LOS DOMINGOS" Y LA VIOLACIÓN DEL SISTEMA DE SEGURIDAD DEL SISTEMA DE LA LOTERÍA.

Mandel era un matemático aficionado y a la vez un contador sin educación especial, llamado "el matemático del domingo", nació durante la era soviética en Rumanía.

En los años 60 del siglo XX, vivió en la URSS, su vida pasó detrás de la Cortina de

Hierro, donde solo había 2 posibilidades para obtener más dinero: actividades ilegales o fugarse hacia Occidente. Mandel se desgarraba para mantener a su familia: es decir a su esposa y sus 2 hijos, con tan solo $88 al mes. Pero Mandel encontró la tercera opción: el algoritmo matemático que le garantizaba obtener las ganancias en la lotería.

STEFAN MANDEL Y EL JUEGO DE LA LOTERÍA.

Mandel decidió alcanzar el éxito de forma sencilla: descubrió que la clave de las ganancias era la identificación de los premios mayores (osea, jackpots), que eran 3 veces más que el número total de combinaciones de números de la suerte.

Como dijo años más tarde Stefan Mandel: "Las matemáticas, cuando se aplican correctamente, pueden garantizar una fortuna".

Por ejemplo, en la lotería, donde se invita a los participantes a elegir 6 números del 1 al 40, por ejemplo, hay las posibles combinaciones ganadoras en la cantidad de 3 838 330. En este escenario, Mandel esperaba un premio mayor, que sea 3 veces más que este número: $11 500 000.

Si el boleto costaba $1 la unidad, entonces se podía obtener todas las combinaciones posibles y depositarlas en 1 boleto que resulte ser el ganador, y como resultado obtener una gagancia significativa, osea el jackpot.

Por supuesto, esto es solo en teoría, ya que mandel tuvo que enfrentar gastos adicionales y considerables , justo cuando el jackpot se convertía en 3 veces más, por lo que tenía sentido de comprar boletos para todas las combinaciones posibles, entonces sólo así la ganancia se mantendría.

TRANSFORMACIÓN DEL JUEGO DE LA LOTERÍA EN UN NEGOCIO.

Los gastos de facturación adicionales y de la logística eran donde el esquema de Mandel se complicaba, incluso si la idea matemática principal (osea el algoritmo) era sencilla.

Después de determinar la lotería con las combinaciones ganadoras correctas al coeficiente del premio mayor o jackpot, Mandel reunía o conformaba a un grupo de inversores, donde cada uno de los cuales contribuía con una cantidad de dinero relativamente pequeña (varios miles de dólares). Con el dinero de sus inversionistas, Stefan Mandel, después compró e imprimió millones de boletos con cada combinación (lo cual estaba permitido por las reglas de la lotería en esos días) posible, y luego los remitía a los distribuidores autorizados de la lotería. Como resultado, la victoria estaba garantizada.

LAS GANANCIAS SE COMPARTÍAN ENTRE MANDEL Y LOS INVERSORES.

Mandel, por primera vez probó este esquema en su nativo país Rumanía con un grupo de amigos. El tiempo libre que dedicó al estudio de las teorías matemáticas dio sus frutos, ya que ganó unos $19 300, lo suficiente para dejar el país con su familia y comenzar una nueva vida en Occidente. Después comenzó a hacer lo mismo en el Reino Unido y Australia en los años 70 y 80.

Por supuesto que hubieron inconvenientes en el esquema. Inicialmente, Mandel tuvo que escribir todas las combinaciones posibles manualmente, lo que aumentó significativamente las posibilidades de cometer errores humanos. El premio gordo rumano de la lotería también era relativamente pequeño; que al haber pagado a todos sus inversionistas, solo ganó unos $4 000 para él.

En general, las ganancias de Mandel no fueron muy grandes, por ejemplo, en 1987, cuando ganó el premio mayor de $1 300 000, al pagar los impuestos correspondientes, y a sus inversionistas, se quedó con el resto de las ganancias de tan solo $97 000.

Pero después de finalmente establecerse en Australia, Stefan Mandel pudo majorar su sistema.

EL MAYOR TRIUNFO DE STEFAN MANDEL.

La aparición de las computadoras en la década de los años de 1980 simplificó significativamente todo el proceso para Stefan Mandel. En lugar de escribir manualmente las combinaciones posibles, hizo todo el trabajo necesario en la computadora.

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Mandel se las arregló para reunir a un grupo permanente de inversores para que siguieran de cerca los premios gordos (jackpots). Durante la década de los años de 1980, el sindicato de la lotería australiano ganó 12 jackpots y otros sorteos de más de $400 000 en otras ganancias, antes de llamar la atención de las autoridades, quienes después cambiaron las leyes de la lotería para evitar futuras manipulaciones con el sistema de seguridad.

Con el apoyo de su red internacional de co-promotores, en febrero de 1992, Stefan Mandel decidió aplicar su sistema a la lotería estatal del estado de Virginia, que alcanzó el premio mayor de más de $27 000 000.

La persona autorizada de Mandel, Anitali Alex logró comprar 7 millones de boletos en más de 100 supermercados y estaciones de servicio de venta de combustible en todo Virginia. A pesar de que los empleados de las tiendas rechazaron comprar la gran cantidad de boletos, no había nada particularmente ilegal en que las personas compren miles de boletos individuales, y fue así como el plan siguió adelante.

LA VICTORIA, LAS CONSECUENCIAS Y LA VIDA DESPUÉS.

El sistema de Stefan Mandel funcionó perfectamente y, el 16 de febrero de 1992, ganó el premio mayor. Esa gran cantidad de dinero atrajo naturalmente la atención de los funcionarios del gobierno, aunque después de numerosas investigaciones, la CIA, el FBI y el IRS declararon a Mandel inocente. Ya que a las finales, todo se reducía a un poco de suerte y a las matemáticas. El mismo Stefan mandel dijo que: "Era necesario tener solo un poco de suerte, matemáticas, y realizar muchos trabajos". Cada estudiante de matemáticas superiores podía calcular las combinaciones posibles". declaró Mandel más tarde.

Al mismo tiempo, al recibir más de $15 000 000, se declaró en bancarrota, para no pagar a los inversores. Posteriormente, participó en varios fraudes de inversión, incluso fue encarcelado por el plazo de 20 meses. Mandel llevó el sistema a la perfección para ganar una fortuna para sí mismo.

En los EE. UU. , las reglas de la lotería se han cmabiado para que nadie repita el esquema de Mandel. A las personas ya no se les permite imprimir sus propios boletos en casa, ya que compran los billetes de lotería de $1 000.

En lo concerniente a Stefan Mandel, el hombre que hackeó el sistema de seguridad de la lotería, "dejó de lado los juegos de azar" y ahora vive en una pequeña isla tropical en la costa de Australia.

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x MPA. (Ref.: p-i-f.livejournal. Rus.tvnet)