Este artículo será para muchos como una píldora amarga. Y esto está bien debido a que ya es hora de deshacerse de los males mentales que obstaculizan el camino a la riqueza.
La gente adinerada exitosa todo lo hace de manera diferente. Por ejemplo, ellos no duermen con el teléfono inteligente (smartphone) entre brazos, se levantan temprano, casi no ven T.V., elaboran un plan detallado de actividades por hacer para el día siguiente y se dedican a hacer deportes. Sin embargo, inocularse (implantarse) a sí mismo estos rituales diarios no implica recibir automáticamente el germen del árbol del dinero. Porque estos tipos de personas piensan de manera diferente. Además, todos los ricos piensan casi de la misma manera. La misma historia ocurre con el modo de pensar de las personas pobres: que también en gran parte es similar y que con la misma fuerza mantiene a los pobres en los bajos fondos de la vida. Esto nos lleva a la conclusión lógica de que si se cambia el programa del pensamiento del "pobre" por el esquema mental de la persona "rica", entonces, esto se traduciría en una mejora cualitativa de la situación financiera. Este concepto lo propuso T. Harv Eker. Este escritor, orador, entrenador de negocios, consultor, fundador y presidente de la empresa canadiense Peak Potentials Training, que se dedica a la prestación de servicios en el desarrollo personal.
La historia de Harv Eker recuerda a la fantástica transformación de un mendigo harapiento en un apuesto príncipe
arismático. En su juventud aspiraba con pasión a la riqueza y para esto trató de probar con todos los medios posibles. Pero nada le ayudó porque el dinero de todos modos "fluyían" a las billeteras de otras personas. Al encontrarse inmerso en sombríos pensamientos acerca de las causas de sus fracasos, Eker de manera casual se encontró con un pariente rico, que le habló del por qué algunas personas son pobres y enfermos, y otros ricos y sanos. La razón justamente se debe a la forma de pensar que es necesario conmutarla a la posición de "riqueza". El joven escuchó el buen consejo y con fuerza se dedicó a los negocios, armado con pensamientos y actitudes actualizados. El negocio gradualmente se hizo prospero, y después de un par de años: el perdedor del ayer se convirtió en un próspero hombre de negocios! Por otra parte, la confianza en la eficacia de este sistema le obligó a Harv Eker dedicarse al asesoramiento empresarial y a escribir un libro en el año 2005. En Rusia fue publicado con el título: "Piense como un Millonario", que se ganó la aprobación de parte de los lectores.
Y entonces, ¿En qué piensan los hombres ricos y famosos? Compare estos diecisiete puntos con sus actitudes, note las diferencias y desde ahora mismo comience a cambiar su vida en algo mejor.
1. Las personas ricas se consideran creadores de sus propias vidas, mientras que los pobres dependen de las circunstancias. Los ricos saben que sus victorias y derrotas son el resultado de sus propias aplicaciones de esfuerzos y al contrario. Lo que significa, que ellos mismos escriben los guiones (o argumentos) de las vinculaciones, desenlaces y culminaciones de sus destinos, pueden dirigir el vector de su movimiento en la dirección correcta y personalmente aceptar felicitaciones en caso de triunfo y las palabras de apoyo en caso de fracaso. Las personas ricas no se lamentan ni se quejan de la infancia difícil, de los padres siempre ocupados, de los malos jefes ni del Estado indiferente. Así sólo lo hacen los pobres. Según Harv Eker, el comportamiento de estas personas consta de tres rasgos característicos: se quejan, constantemente se justifican a sí imismos y culpan a los demás. 2. Los ricos se hacen más ricos, mientras que los pobres justo esto es lo que desean ¿Tiene desventajas la riqueza? Si se le hace esta pregunta a un hombre pobre, él lo pensará y encontrará por lo menos varios rasgos negativos de la riqueza. Por ejemplo, que es posible perderla. O ir (por ella) a parar a la cárcel. Desperdiciar sin pensar. Y en general, que todos los ricos son codiciosos y avaros. Como resultado, por un lado, la gente quiere ser rica, pero por el otro, a la riqueza, incluso conscientemente, le tienen miedo. Por esta razón es que nunca se enriquecen. Mientras que el que haya ganado,una gran cantidad de dinero, a la pregunta sobre las desventajas de la riqueza, responderá rápidamente y con claridad: ¿Es que las tiene? 3. Los ricos trabajan para convertirse en ricos y los pobres para pagar las cuentas
Harv Eker nombra a las tres principales condiciones financieras humanas: la pobreza, la comodidad o el comfort (que justamente corresponde a la clase media) y la riqueza. Los pensamientos de un hombre pobre y de una persona con ingresos promedio son más o menos similares: Debo de ganar tanto dinero para pagar las facturas o comprar un nuevo refrigerador. Los ricos así no piensan. Porque ellos tratan de lograr la riqueza de forma global, sin hacer referencia a cualesquier tipo de pagos y compras. El mismo autor de esta concepción pasó por estas tres condiciones financieras y está convencido de que es necesario apostar ante sí mismo sólo el punto más alto de esta pirámide financiera: la Riqueza. Porque sólo así realmente se logrará. Aquí, Harv Eker no sólo teoriza. En su libro (arriba citado) da recomendaciones prácticas y proporciona herramientas para cambiar el "programa financiero" de cualquier persona.
4. La gente rica piensa globalmente (osea en grande), mientras que la gente pobre piensa en lo pequeño y de manera local
Harv Eker está seguro que ser rico, en todos los sentidos de esta palabra, significa influir positivamente en las vidas de otros a cambio del dinero. Su definición de emprendedor es: una persona que resuelve los problemas de otros, por una remuneración. Los ricos resuelven problemas de miles y millones de personas. Mientras que los pobres, sólo sus propios problemas. Ampliar sus zonas de influencia, al hacerse ya ricos, les obstaculiza el temor al éxito y al fracaso, y la falta de confianza en sus propias capacidades. Sin embargo, el talento único y la capacidad los tiene cada persona. No es necesario tener miedo en revelarles al mundo. Desarróllese, aprenda y aspire a lograr más, porque por esto será recompensado.
5. La gente rica se centra en las oportunidades, mientras que los pobres se centran en los obstáculos
Existe una ley que se aplica en todos los ámbitos de la vida, sin excepción: "Todo lo que se encuentra en el punto de mira, se incrementa hasta un tamaño gigantesco". Si en el centro de vuestra atención están los temores, precauciones, las pérdidas y los fracasos, entonces nunca será capaz de ganar. La gente rica ve las oportunidades, perspectivas, buscan posibilidades y están dispuestos a asumir riesgos conscientes. Ellos piensan así: todo saldrá bién, porque yo quiero que esto suceda así y para esto haré todo lo posible. Y ellos realmente logran grandes resultados.
6. La gente rica admira a otra gente rica y próspera, mientras que a la gente pobre les molesta la gente rica y próspera
La riqueza ajena y el éxito sacan a uno de sus casillas, obligan a ennegrecerse de envidia, y se convierten en un obstáculo en el rumbo para lograr su propio éxito. Las personas que son intolerantes a los logros de los demás, nunca tendrán éxito. Para muchos pobres, la riqueza es un sinónimo de la avaricia, de la permisividad (o transigencia), del engreimiento y de la codicia. ¿Cómo, entonces, en este caso, podemos ser la persona que causa sólo emociones negativas? ¿Cómo se puede aspirar a ser una persona al que se le odia? La gente rica piensa diferente. El éxito ajeno para ellos es un motivo de aplausos, de admiración y de conclusiones útiles, está seguro Harv Eker.
7. La gente rica se relaciona con personas exitosas y prósperas, mientras que la gente pobre con personas sin éxito y no prósperas
Las personas pobres prefieren quejarse y buscar consuelo en compañia de personas similares. La imitación es uno de los métodos de enseñanza más eficaces. Por eso, al estar en la sociedad de los que lograron más, la gente automáticamente se carga de sus energías, perseverancia y adopatan ideas exitosas. Mientras que la sociedad de los perdedores, en el mejor sentido, se mantiene en su lugar, y en el peor sentido, se sienten atraidos hacia los bajos fondos aún más fuerte. En este caso, el dicho "dime con quién andas y te diré quién eres" es actual más que nunca.
8. La gente rica no pierde la oportunidad de promocionarse ella mísma, mientras que a la gente pobre piensa de forma negativa en lo que se refiere a la venta y la promoción Los ricos tienden a ser excelentes líderes y anunciantes publicitarios. Ellos nunca pierden la oportunidad de hablar sobre sus productos (o servicios), sus ventajas y ofrecer un buen descuento. La actitud de los pobres a la publicidad es a menudo negativa. Para muchas personas, hablar sobre sí mísmas es vergonzoso, debido a que sus padres les enseñaron que debemos ser modestos y no mostrarse. Algunos creen que un buen producto (o servicio) no necesita publicidad. Alguien se averguenza de ser demasiado intrusivo y de quitarle el tiempo a los clientes potenciales. Para estos tipos de personas el camino para amasar una gran riqueza está cerrada. Un refrán popular dice que para convertirse en un millonario, es necesario inventar una ratonera (osea, una trampa para ratones) y venderle a todo el mundo. Pero para hacer esto su ratonera debe ser conocida, añade Harv Eker. 9. La gente rica es más grande que sus problemas, mientras que la gente pobre es más pequeña que sus problemas Los problemas, las dificultades y las crisis les ocurren a todos en absoluto. Sin embargo, la forma en que una persona se siente y se comporta en una situación crítica, es la que determina la longitud de su camino a la riqueza. La ruta a la riqueza es fácil sólo para los hijos de los oligarcas, porque es prácticamente cero. Todos los demás deben de encaminarse a través de un bosque espeso y hacerse, en la vía hacia la caja bancaria, muchos chinchones. la gente rica entiende esto y es por eso que tratan de estar por encima de los problemas. Mientras que los pobres tienen miedo de ellos, que los evitan de todas las formas posibles y que sucumben bajo la carga de los problemas, Y que, en última instancia, se quedan sin nada. "El secreto del éxito, amigos míos, consiste no en la forma de evitar, eliminar o esquivar las dificultades, sino en crecer lo suficiente como para estar por encima de cualquier problema", dice Harv Eker.
de Humberto Ortega 10. La gente rica sabe aceptar los regalos del destino, mientras que los pobres los evitan Para la gente pobre es característica la insusceptibilidad a los regalos del destino. A menudo no creen que son dignos a tales trofeos y pasan de largo. Mientras que la gente rica nunca hace así. Ellos son abiertos a las sorpresas y nunca pierden la oportunidad de encerrar a la ave de la felicidad en una jaula. ¿Por qué los pobres rápidamente se esconden en la sombra al aparecer en el cielo por lo menos un rayo del Sol? Porque ellos se consideran indignos de este calor. Las razones de la falta de confianza pueden ser muchas, no obstante la dignidad o la indignidad del bien, son conceptos muy subjetivos, que en el camino hacia la riqueza no juegan ningún papel. Considerarse digno de cualquier cosa es un derecho exclusivo de cualquier individuo. Y más es un empate. Una de las principales fuerzas impulsoras, en el camino hacia la riqueza, es el ponerse a prueba y demostrar su valía a sí mismo y a los demás. Toda la gente rica lo hace así.
11. La gente rica elige que se le pague según los resultados, mientras que los pobres eligen que se les pague según sus horas de trabajo Como se sabe, los salarios elevados estables son el sueño de muchos. Porque tener un trabajo de este tipo es cómodo y tranquilo y sustenta en la vida un nivel adecuado de estabilidad. Sin embargo, para muchos, el horario laboral "de campana a campana" y el salario fijo son una barrera infranqueable en el camino hacia la riqueza. Incluso se podría decir que es una trampa. La sensación de la previsibilidad del día siguiente relaja a la gente y quita la posibilidad de desarrollarse y de buscar nuevas oportunidades de obtener ingresos no relacionados al sueldo fijo. Pero es que justamente, según este principio, gana dinero la gente rica. Es poco probable que a Donald Trump, Warren Buffett o a Olég Tinkoff mensulamente el salario les "gotea en la tarjeta bancaria" de manera constante como a Ud. Por eso es que los ingresos de ellos son otros, es decir con un gran número de ceros. 12. La gente rica piensa "en esto y en lo otro", mientras que los pobres piensan "en esto o en lo otro"
Los pobres y los representantes de la clase media solían pensar que de la vida no se debe querer demasiado y que siempre es necesario hacer una elección. ¿Dedicarse a la carrera o al cuidado de la familia? ¿Obtener otra educación superior o encontrar un nuevo empleo? ¿Trabajar todo el verano con el sudor de la frente o gozar de las vacaciones? Pero es así que, donde el pobre siempre se pone a reflexionar sobre la prioridad, el rico quiere todo y a la vez. Es decir que él empieza a pensar febrilmente, cómo podría matar dos pájaros de un solo tiro. Conseguir todo en el mundo es imposible, pero lograr lo que realmente se desea, es muy real. Pregúntese, cómo se puede obtener tanto lo uno como lo otro? ¿Qué necesito hacer para lograr esto? Porque esta pregunta es capaz de cambiar radicalmente la vida de cualquier individuo. 13. A la gente rica les preocupa el capital neto propio, mientras que a los pobres les preocupa lo que ganan con su trabajo
El capital es el valor de todo lo que se posee. Es precisamente el capital que es el principal criterio de la riqueza. El salario mensual aquí casi no desempeña ningún papel. Es decir que es uno de los cuatro componentes del capital. Además de él, para estimar la fortuna (o situación financiera) específica, también se tienen en cuenta los ahorros, las inversiones y la minimización de los gastos (o costos). A estos cuatro componentes, el autor los compara con las ruedas del autobús. Que le pasará, si el autobús tiene que viajar con tan sólo en una rueda? Es poco probable que tal vehículo recorra una distancia larga. Otra cosa sería si el autobús tiene las cuatro ruedas puestas, y que todos ellos funcionann correctamente. Porque esto les permitría a la gente rica viajar rápidamente y sin problemas, siempre llegando a su destino. 14. Los ricos hacen trabajar el dinero, mientras que los pobres trabajan por el dinero Los que, desde su infancia, les aseguraban que se podía lograr el éxito, cruelmente se equivocaron ya que quizás los encaminaron por un camino falso. Es poco probable que sus padres y profesores correspondan a la categoría de personas super-adineradas, aunque probablemente trabajaron hasta sudar la gota gorda. Así piensan y hacen los pobres. Así mismo, a ninguno de ellos, el trabajo penoso sin días de descanso, no les permitió hacer una fortuna. Esto los lograron sólo aquellos que transformaron el trabajo duro en un trabajo razonable. Mientras que aquellos que también trabajaron duro pero que los hicieron así sólo en un cierto período de su vida, y que después de esto fueron capaces de disponer el dinero ganado y hacer de tal manera que cada billete trabaje en su lugar y para ellos mismos. En este contexto, Harv Eker contempla en detalle el significado de los ingresos pasivos y explica por qué las personas no saben invertir su dinero de forma adecuada para obtener finalmente la autonomía financiera. El hecho es que los pobres viven para el día de hoy y no piensan lo que les sucederá mañana, lo que significa que no planifican estos acontecimientos (o eventos). Mientras que los ricos todo lo calculan y planifican de antemano. 15. La gente rica aprende y se desarrolla constantemente, mientras que los ricos creen que tienen suficiente conocimiento La frase: "Ya lo sé", son las palabras más peligrosas en la conversación de cualquier persona. Porque infunden la confianza indebida en sus propias capacidades y competencias y que obstaculizan completamente el deseo de crecer y aprender cosas nuevas. Saber algo con certeza puede sólo aquel que personalmente experimentó esta situación. Los argumentos acerca de lo que se oye hablar sobre esto o que se lee en alguna parte, aquí no funcionan. Los pobres a menudo toman esta posición, y esto funciona en contra de ellos. Mientras que la gente rica piensa de manera diferente. Ellos saben que si sus actividades no les va tan bién como los quieren, esto significa que desconocen algo y no lo hacen. Es precisamente esa sensación del conocimiento incompleto que los empuja para perfeccionarse aún más y trabajar para su propio beneficio y el beneficio de la cuenta bancaria. 16. La gente rica actúa a pesar del miedo, mientras que a los pobres les paraliza el miedo Permanecer en la zona de confort es agradable, no obstante esta comodidad no da la oportunidad de desarrollarse ni de asumir riegos, no revela nuevas perspectivas, no ayuda a establecer nuevos contactos, es decir que paraliza la capacidad de crecer y desarrollarse, lo que implica que aleja al individuo del éxito y la riqueza. Pero ir más allá de los límites de esta zona, da miedo. Porque, y si, ¿derepente no funciona? El temor al fracaso asusta a ricos y pobres, pero, a estos últimos los mantiene dentro de la zona de confort, mientras que los primeros hacen esfuerzos para superar las emociones negativas. Ellos saben que precisamente en el momento cuando están inquietos, incómodos y ansiosos, ellos realmente crecen y se desarrollan. Los pobres prefieren quedarse inmóviles en la ansiedad y temen una vez más levantar un solo dedo. Porque la comodidad para ellos implica ser demasiado. Como resultado, las oportunidades, el dinero y los contactos se alejan hacia otras personas. 17. La gente rica administra el dinero de manera efectiva, mientras que los pobres no sabe administrar el dinero Pero esto no quiere decir que los ricos sean más inteligentes que los pobres. Las personas más ricas obtuvieron su cuenta de dinero sólido mediante un manejo más hábil del dinero. Y esta es una habilidad que, si se desea, se puede desarrollar en sí mismo. Harv Eker ofrece toda una colección de instrucciones detalladas y recomendaciones prácticas, disipando simultáneamente los estereotipos de los pobres acerca de que la planificación financiera restringe la planificación como tal y que es un atributo (o dote) de aquellos que ya disponen de una gran riqueza. "En nuestro Universo hay una regla que es la misma para todos: "Mientras no muestres tu capacidad de administrar lo que tienes, más no lo conseguirás", concluye el experto. Según Harv Eker, nuestro éxito financiero no depende de nuestra educación, asiduidad (o diligencia), e incluso de la suerte, sino del programa del dinero y del éxito, arraigados en el subconsciente. Eker considera que cada uno de nosotros tiene un programa financiero personal que determina el nivel del bienestar económico, y da consejos prácticos para su modificación, si es necesario. ------------------
Por MPA.
(Ref.: Bca-enter; e-xecutive.ru)