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6 MITOS SOBRE EL AGUA QUE DEBEMOS DEJAR DE CREER DESDE AHORA MISMO.


En las revistas de moda y de deportes se escriben artículos sobre los beneficios del agua con sorprendente regularidad. Mientras que en las redes sociales divergen los múltiples y a veces conflictivos datos sobre la misma. El autor de este artículo escrito en Ruso: Alexei Sabélskiy, periodista y geografo de profesión que escribe para Lifehacker.ru, analiza los conceptos erróneos y aclara: cuándo, en que forma y la cantidad de agua que debemos consumir diariamente.


1. Es necesario beber 8 vasos de agua al día.

La fórmula de los 8 vasos vaga de revista en revista. Esta absurda regla simplista, que fue publicada en la prensa extranjera aún en 1945, sugiere que el consumo (incluído con la comida) del líquido por día es equivalente a unos 2 litros de agua. El agua puede ser consumido en cualquier forma, es decir: en la sopa, zumos, frutas y verduras, y en el té o café, etc... Pero la frase: "beba 8 vasos de agua al día" lo perciben literalmente.

2 litros de agua, es la cantidad promedio adecuada para una persona adulta sana, que no se dedica al trabajo físico. Los hombres y mujeres, a atletas y trabajadores de oficina, los habitantes de países fríos y calurosos requieren de diferentes cantidades de agua.

Es mejor confiarse en la sed. Es decir que si desea beber, beba. Lo más importante es compensar la pérdida del agua, lo que garantiza el metabolismo, lo que es especialmente importante para las personas que sufren de obesidad. Los científicos del Colegio de Medicina de Navi Mumbai en la India llevaron a cabo un estudio [1], donde un grupo de personas voluntarias de 18-23 años, que durante 8 semanas bebieron medio litro de agua 3 veces al día: es decir, antes del desayuno, del almuerzo y la cena. Al final de la prueba, los pesos de los voluntarios, decayeron.

"Beber el agua potable en forma pura, es también útil. Porque, a diferencia de los zumos, café o leche, el agua no contiene cafeína, grasas, hidratos de carbono y otras sustancias que pueden dañar el organismo con el uso inmoderado".

En 2010, los investigadores establecieron [2] que beber el agua potable antes de las comidas reduce la ingesta de calorías.

2. Es necesario beber agua embotellada.

Este concepto erróneo es compatible con los datos completamente objetivos sobre la mala calidad del agua potable que sale, sobre todo, del grifo en los diferentes países del mundo. Pero si de los grifos fluye el agua, de acuerdo con las normas sanitarias vigentes, o que pasan a través del filtro de agua, será suficiente hacerlo hervir. Se aconseja cambiar el filtro de forma regular.

Los fabricantes producen el agua mineral y el agua destilada. Gracias al contenido de sodio, el agua mineral es útil consumirlo para hacer esfuerzos o ejercicios físicos. Pero si el agua es terapéutico, no se puede beber para saciar la sed. Muchos aconsejan beber mejor el agua mineral embotellada en botellas de vidrio (observación mía).

3. Beber agua mientras se come, es malo.

Esto es curioso, pero así dice la gente, convencida de los beneficios de la sopa y de los daños de comer el pan seco. Pero en la realidad, lo que pasa es que al beber el agua potable, conjuntamente con los alimentos, ayudamos al estómago a digerir lo comido.


4. Beber agua, durante los ejercicios físícos, es dañino.

Los viejos atletas soviéticos a veces decían que beber el agua, durante los ejercicios físicos, aumenta el volumen de la sangre, obligándole al corazón a realizar más esfuerzos al estar funcionando. Pero, en la realidad, todo es lo contrario. Porque, con la pérdida del agua, la sangre se vuelve más espesa. Esto es lo que complica el funcionamiento del músculo cardiáco. Los dietólogos y entrenadores aconsejan beber agua en cualquier momento del entrenamiento, y así mismo, antes y después del mismo. Lo más importante es que no se debe beber demasiado, al respecto hablaremos, luego.


5. No se debe beber agua, demasiado.

Esta afirmación es un mito, pero a medias. La idea de que el exceso abundante de agua impide adelgazar, carece de toda argumentación científica, porque el agua asegura nuestro metabolismo. El exceso del agua es eliminado del cuerpo mediante medios naturales. Y si su organismo tiende a acumular el fluído, debe consultarle a su médico.

Para causarle daño al organismo con el agua, es necesario beberlo demasiado, tal vez incluso en contra de la voluntad. Los científicos del Instituto de Neurofisiología y de la Salud Mental en Melbourne (Australia) dicen que al consumir el agua en exceso, en el cerebro humano se activa el mecanismo que inhibe el reflejo de la deglución.

"Beber más de 3 litros de agua, en el transcurso de 1 hora, no se recomienda extremadamente, y especialmente a los atletas, porque durante los entrenamientos, del organismo se expulsa el sodio. Su insuficiencia, al consumir el agua, conduce a la hiponatremia, que no deja extraer el líquido desde el organismo, sino que se acumula en las células".

6. Beber abundante agua ayuda a combatir la Infección Respiratoria Aguda (IRA) y la resaca.

Mucha gente sabe que, durante los resfriados, es necesario beber mucha agua, pero, no todo el mundo entiende, ¿Por qué?. El agua, por si mismo, no cura la gripe ni la IRA. Este recupera el líquido durante la enfermedad, que también es importante.

El agua, durante la resaca, es necesario justamente por las mismas razones. El alcohol expulsa intensamente el líquido del organismo, por lo que la debemos de consumir. El uso de remedios caseros para la resaca, -como la salmuera-, ha sido conformada mediante datos científicos. La sal, contenida en la salmuera, ayuda a recuperar la pérdida del sodio. Lo más importante, es no excederse.

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Por MPA.

(Ref.: Bca-enter)

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